Quinto tema : Las costumbres precolombinas
La semana pasada empezamos con la música de nuestros antepasados y que todavía siguen persistiendo y de eso debemos encargarnos nosotros, con el fin de seguir manteniendo nuestra cultura y costumbres en nuestro país.
Primero escucha el primer video, luego lee el texto y finalmente escucha el segundo video.
Ahora lee el texto para informarte más:
América Precolombina. Su pensamiento, sus tradiciones y sus costumbres
Abril del 2012
América es una tierra rica y fecunda, en cuyo seno han florecido algunos de los más grandes pueblos y civilizaciones de la Historia. NO cabe duda que sus monumentales restos arqueológicos atraen poderosamente la atención, despertando en nosotros el deseo de conocer mejor a aquellos pueblos antiguos que fueron capaces de edificar unas colosales ciudades-santuario rebosantes de pirámides, templos y avenidas procesionales.
Tiahuanaco, Copán, Palenque, Tikal, Machu Picchu, Teotihuacán… perdido y envuelto entre sus legendarias ruinas, todavía flota el eco dormido , los símbolos del Mito de la creación, del divino origen de los hijos del Sol, de legendarias dinastías de reyes sagrados, de sagas heroicas, de guerras floridas.. y de profundos misterios cosmotelúricos… sus viejas piedras, tapizadas por un verde manto de exuberante belleza, exhalan un intenso perfume de grandeza y de nostalgia hacia unos Dioses antiguos, cuyos templos fueron levantados por amor a la Vida, a la Luz y al aliento Divino que ellos sentían latir en toda la Naturaleza. En la calma que precede al anochecer estrellado…la suave brisa del ocaso trae hasta nosotros un profundo aroma de eternidad… es la voz de los tiempos pretéritos que hechiza nuestros sentidos haciendo que nos sintamos irremisiblemente enamorados de la vieja Alma de América Precolombina.
Pero antes de comenzar nuestro fascinante viaje en busca de su Sabiduría, sus tradiciones sagradas y sus costumbres seculares, debemos tener en cuenta que es materialmente imposible poder agrupar en un mismo artículo a todas las culturas que florecieron en América antes de la llegada de Colón -genéricamente denominadas «Precolombinas»– pues no sólo se trata de pueblos bastante distintos entre sí, sino también muy alejados, tanto en su espacio geográfico, como en el tiempo histórico que vivieron.
No obstante, dentro del variado mosaico pluricultural de América Precolombina, destaca la notable similitud que existe entre muchos de sus mitos, ritos y tradiciones sagradas, así como la gran analogía que podemos observar entre sus principales símbolos y relatos cosmogónicos, lo cual refleja que es una misma estructura ontológica la que fundamenta su pensamiento religioso. Una concordancia metafísica que a través de innumerables ejemplos pone en evidencia que nos hallamos ante las diversas ramas de un mismo tronco esencial… el de una Sabiduría Ancestral -común a todas ellas-, que floreció en el tiempo y en el espacio, expresándose a través de una iconografía y unas formas artísticas que podemos definir sin duda como «propiamente americanas». Es por eso que, tanto si nos hallamos ante la presencia de pueblos nómadas, cazadores o agricultores; como si se trata de los habitantes de las grandes Ciudades-Estado que hay diseminadas por el centro y el sur del continente americano; encontramos siempre unos mismos rasgos comunes, que resultan idóneos para iniciar nuestra aproximación al estudio del pensamiento y las tradiciones de América Precolombina. Pero antes de ello, sería conveniente que pudiéramos dejar atrás todos aquellos prejuicios que se han ido acumulando durante los últimos siglos, desde que los primeros conquistadores europeos –que curiosamente eran analfabetos en su mayor parte- calificaron a los habitantes autóctonos de estas tierras de «tribus primitivas», pues, a juzgar por los magníficos restos arqueológicos y paleográficos que todavía seguimos estudiando, hoy sabemos que nos hallamos ante unos pueblos que eran bastante más civilizados de lo que se pensaba… culturas con un alto grado de desarrollo que poseían sofisticados conocimientos técnicos, científicos, artísticos, políticos, literarios, cosmogónicos, metafísicos y también éticos.
Los hombres que habitaban estas tierras tenían una cosmovisión orgánica del Universo, al que ellos veían como un inmenso Ser vivo, un Macro-Bios o «Gran Vida», que albergaba en su seno incontables miríadas de seres pertenecientes a muy distintos estados evolutivos, pero todos ellos armonizados en un perfecto equilibrio ecológico. Según esta mentalidad, el concepto de «Ser Vivo» no se ceñía tan solo a los seres orgánicos, sino que abarcaba a toda la Naturaleza, siendo el hombre un ciudadano más de la creación que se hallaba en permanente diálogo con todos los seres y criaturas que habitan los mundos visibles e invisibles. Este natural vínculo de unión con los demás seres y fuerzas de la Creación, inspiraba en ellos un profundo sentimiento de gratitud, adoración y reverencia hacia el divino Espíritu de la Naturaleza. El hombre se sentía hijo de la Tierra… la «Gran-Madre-de-Vida» a la cual debía amar, cuidar y respetar; pues a diferencia del hombre actual, que se proclama a sí mismo como dueño absoluto de la tierra, a la cual se cree con derecho para explotar, maltratar y contaminar; el hombre de estas sociedades tradicionales sentía que era él, el que pertenecía a la Tierra, pues de ella había surgido, en ella vivía, de ella se alimentaba y a su amoroso seno habría de retornar al final cuando muriese.
La vida y la muerte no eran considerados pues como estados definitivos del Ser, sino que formaban parte del constante flujo y reflujo de la existencia en el gran ciclo cósmico del devenir. Por otro lado, dado que ellos veían la Tierra como un espejo de la armonía celeste, el hombre podía participar también de esa misma armonía, pues de la misma manera que los astros se hallan en continua revolución cíclica… los días suceden a las noches… el sueño a la vigilia… y que la vegetación se renueva periódicamente en sus estaciones, también el hombre se sentía inmerso en ese eterno ciclo de Vida-Muerte-Renacimiento. Por eso la muerte era vista como un estadío natural de la vida… un tránsito hacia otra forma de existencia más sutil y espiritual, ya que para ellos, la creencia en la inmortalidad de alma formaba parte esencial de su cosmovisión trascendente…
Desde un punto de vista antropológico, catalogar a estas Culturas Tradicionales de politeístas, panteístas o animistas resultaría un tanto vago e impreciso, ya que estas denominaciones no son en verdad más que términos genéricos que, a modo de etiquetas mentales, nosotros utilizamos como marco de referencia para poder conceptualizar la realidad. Pero no debemos olvidar que la realidad es siempre mucho más amplia, sutil, espontánea, multidimensional y rica en matices de lo que cualquier etiqueta o definición racional nos pueda indicar. Por eso, los sabios antiguos decían siempre que las cosas importantes de la vida hay que saber mirarlas con el corazón y no cabe duda que para todos estos pueblos, sus dioses, sus mitos y sus símbolos sagrados, no sólo eran muy importantes, sino que, como ya se ha dicho, eran «sagrados».
Es por eso que la religión, entendida como la unión del hombre con lo sagrado, abarcaba todas las facetas de su vida, tanto a nivel político, laboral o social, como en lo público y en lo particular. En efecto, para ellos el tiempo era un continuo proceso de renovación interior y de lucha contra las fuerzas de la no-existencia que someten a todo lo viviente a un perpetuo estado de desgaste y descomposición. Y así es como a través de sus ritos mágicos, ellos se esforzaban en mantener la unión y la armonía entre el mundo de los hombres, las fuerzas invisibles de la naturaleza y el mundo de los Dioses y los Espíritus. Por eso, el dominio de las energías ocultas de la naturaleza, los conocimientos proféticos y adivinatorios, la interpretación de los oráculos y los augurios, el poder curativo de las hierbas y demás esencias de la Naturaleza, la magia como medio eficaz de mantener alejada a la fatalidad y el infortunio y, en suma, lo que ellos entendían como la ciencia de la vida y la ciencia de la muerte, eran la brújula espiritual que orientaba permanentemente su quehacer cotidiano.
Deshacedores del mal, mediadores entre lo visible y lo invisible… y responsables ante su comunidad de mantener la comunicación entre el mundo de los vivos y el mundo de los muertos, los chamanes poseían una sabiduría intuitiva capaz de interpretar el misterioso mundo de los sueños y las visiones. Ellos usaban determinadas «palabras de poder» para atraer a las potencias benéficas y para exorcizar a las fuerzas tenebrosas y a los malos espíritus. Y así, con el correr de los siglos, los Chamanes fueron desarrollando y perfeccionando un lenguaje tradicional, repleto de metáforas, símbolos y mitos; por medio del cual ellos supieron expresar y transmitir eficazmente de generación en generación, su cosmovisión, su ciencia sagrada y los valores ancestrales de su cultura.
Finalmente, para poder llegar a entender un poco más a fondo la mentalidad de estos pueblos, conviene que prestemos especial atención a uno de sus símbolos cosmogónicos más importantes, dado que constituye el origen y fundamento de toda su Cosmovisión: se trata del Centro, el «eje universal» o «axis-mundi», pues como bien explica el historiador de las religiones Mircea Eliade: «El Centro es el eje de intersección de los tres niveles cósmicos: Cielo, Tierra e Inframundo… es el espacio creacional por excelencia, el punto en el que dio comienzo la creación».. De ahí que el nombre original de muchas de las grandes ciudades precolombinas exprese esta misma realidad simbólica, como la ciudad de Cuzco, cuyo nombre significa «Ombligo del mundo»; Machu Picchu, que es «la Montaña primordial»; la ciudad Maya de Tikal, que se traduce como «La ciudad de las voces de los espíritus», o la impresionante ciudad de Teotihuacan, en México, cuyo nombre significa «la ciudad donde los hombres se transforman en Dioses», designando así el lugar sagrado donde los hombres podían llegar a alcanzar su condición divina, aquí en la tierra, por medio de la Iniciación.
Las culturas de América Precolombina, es para los historiadores y antropólogos un valioso eje de referencia que nos permite orientar con acierto el difícil curso de nuestras investigaciones, dentro de un contexto lógico y coherente, pues a la hora de interpretar la mentalidad, la conducta y las motivaciones del hombre de las sociedades tradicionales, vemos que la Iniciación es el modelo de experiencia que establece el fundamento de sus principales actividades e instituciones, sociales, políticas y religiosas. Por otro lado, la sorprendente homogeneidad del proceso iniciático, sea cual sea la cultura de la que se trate, constituye por sí misma una evidencia incuestionable de la existencia de una misma «Ciencia del Espíritu», cuyos símbolos, ritos, grados y pruebas de acceso, parecen ser tan universales como atemporales, dado que forman parte del patrimonio común de la Sabiduría perenne. Lo cierto es que toda la literatura americana, tanto la de sus libros sagrados como el Popol Vuh o el Chilam Balam, como sus crónicas históricas escritas en Códices sobre cortezas de árbol y piel de venado; al igual que las representaciones pictóricas y los textos grabados en jeroglífico maya sobre las piedras de sus monumentos, están escritos en un arcano lenguaje plagado de símbolos metafísicos, que tiene mucho en común con otras culturas y civilizaciones del mundo… son los restos una Sabiduría ancestral a la que humildemente hoy nos hemos acercado y con la que pensamos proseguir en este fascinante viaje filosófico. En nuestro próximo encuentro nos asomaremos con curiosidad -aunque sólo sea por un instante- a la extraordinaria civilización de los mayas, a las tierras andinas de los incas, a los originarios mexicas o aztecas y a la fascinante cultura de los Pieles Rojas… Hasta muy pronto.
Javier Vilar y Hermina Gisbert
Ahora observa y escucha el segundo video, toma conciencia del por qué es importante rescatar y seguir manteniendo nuestra cultura antigua:
Muy bien ahora que has leído y has observado los videos espero que hayas reflexionado de lo importante que son las culturas precolombinas americanas y en especial la nuestra "cultura Inca"
Actividades:
1. Relata sobre que trata el primer video.
2. Del texto que leíste indica las características de las costumbres precolombinas americanas.
3. ¿Cuál es el mensaje del texto y del segundo video? (un sólo mensaje toma en cuenta el texto y el segundo video) El mensaje debe tener explicaciones y reflexiones de tu persona. (Debe ser amplio)
4. ¿Qué Inti Raymi, cuál es su objetivo?
5. Averigua y escribe la canción "El cóndor pasa" (Escribe la versión en castellano) Indica además el mensaje de dicha canción, no olvides realizar un dibujo alusivo a esa canción.
6. Realiza un aviso publicitario con el fin de rescatar las culturas precolombinas. (toda una cara)
Fecha de entrega del trabajo: Hasta el viernes 17 de abril.
Responde en comentarios:
" ¿Te parece importante rescatar las culturas precolombinas? ¿Por qué?
Buenos días chicos, espero que hayan leído es tema de las costumbres de nuestros pueblos. Espero tu asistencia diaria, y tus comentarios. Tus comentarios deben ser más consistentes, y debes expresarte más. Tu cuaderno es tu evidencia de trabajo, por lo tanto, debes expresarte más, ya no sólo tres líneas. Ten en cuenda que tu presentación de cuaderno indica tu personalidad : se estás tranquilo, aburrido, conformista. Las cosas se realizan bien, no lo hagas por hacer. Ten en cuenta tu ortografía, tu caligrafía, debe entenderse lo que escribes, las comas, las mayúsculas. Usa dos lapiceros, tus colores, se creativo. A la vez investiga sobre el tema. Descubre más por tu parte, no porque te dice el profesor, sino para ti mismo. Espero tu buen trabajo y tus comentarios. Que les vaya bien.
ResponderEliminarBUENOS DIAS MISS LEONARDO ABREGOU PRESENTE
ResponderEliminarNo olvides tu comentario... esa ortografía y trabaja despacio, no aprietes el lapicero, usa colores
EliminarBuenos días miss, Jean Rodriguez presente
ResponderEliminarBuenos días profesora, Adriano Andonaire Presente
ResponderEliminarMi comentario sobre las cultura precolombinas es que es muy importante rescatarla porque forman parte de nuestra identidad y es una cultura muy rica en todo los aspectos. Todas estas culturas aunque se han desarrollado por diferentes partes de América tienen mucho parecido entre ellas y por eso es una manera de hermanarnos y unirnos con otros países de América porque compartimos un pasado de grandes culturas con valores y respeto por la naturaleza y los demás.
Muy bien Adriano ..no olvides la presentación de tus actividades
EliminarBuenos días miss, Adrián Tupia presente
ResponderEliminarBuenos días miss, Cleidy Peña presente
ResponderEliminarBuenos dias, Marco Valentino presente
ResponderEliminarMi comentario respecto si debemos rescatar las culturas precolombinas, es que si, ya que de eso venimos y debemos aceptar el hecho de tener esas costumbres y no burlarnos por eso, deberiamos reconocer con orgullo que esas costumbres lo hicieron nuestros antepasados
EliminarY crees que debemos seguir esas tradiciones??? A ver qué piensas tú y lis demás respondan...lis espero
EliminarBuenos días miss, Jeferson La Cruz presente
ResponderEliminarBuenos dias miss, Carlos Toribio presente.
ResponderEliminarJerry Medina presente uu
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarComento que sí, porque aquellas costumbre y tradiciones de nuestros antepasados deben ser valoraradas y más que eso forma parte de nuestra identidad, una identidad donde se sabe que apreciamos las grandes culturas realizadas. 🐽💕
ResponderEliminar¿Te parece importante rescatar las culturas precolombinas?
ResponderEliminar- Si, ya que la importancia de conservar y apoyar las iniciativas culturales es vital para seguir sosteniéndonos no sólo como individuos, sino para preservar nuestra identidad. También es conservar y seguir desarrollando nuestra cultura es fundamental para nuestro crecimiento y conocimiento de nosotros.
Si me parece importante rescatar las culturas precolombinas, pues es parte importante de nosotros pues es algo que ha estado con nosotros durante muchos años, es nuestra identidad y por ello debemos mantenerlo de cualquier forma, ya sea compartiéndolo o haciendo campañas, pero de alguna u otra forma esto se debe preservar para que así los demás también puedan saber de eso y se siga manteniendo.
ResponderEliminarJeferson La Cruz - 4to de secundaria
Si es importante, porque gracias a que todavía se mantiene ésta tradición en Cuzco más personas podemos conocer algo más de sus costumbres ancestrales que tenían, una de ellas es la fiesta del Inti Raymi donde se le rinde tributo al Sol en agradecimiento por sus cosechas, de cualquier forma siempre va a ser importante que se siga manteniendo éstas tradiciones para así conocer de donde provienen nuestras raíces.
ResponderEliminarAdrián Tupia Q. - 4to de secundaria